Sorprendió el Cartagena adelantándose en el marcador gracias a la experiencia y la picardía de un Alfredo Ortuño que se reivindica como el delantero que necesita este equipo y que supo donde meter la pierna para recibir penalti. Supo también ponerla en la escuadra.
No se vino abajo tras recibir el gol ‘psicológico’ antes del descanso y sorprendió con una actitud demoledora en la segunda mitad que le llevó hasta su segundo gol, también de Ortuño. Y por último, volvió a sorprender para reponerse a un desgraciado gol a falta de cinco minutos para el final logrando el tanto de la victoria en el 96 gracias a un nuevo penalti que Sadiku, sustituto de Ortuño, envió al fondo de la red.
El partido loco en El Alcoraz arrancó con un Huesca mandón y un Cartagena bastante errático. Los locales se echaron encima del campo de los albinegros, que vistieron por primera vez esta temporada la segunda equipación, y provocaron fallos graves en la salida de balón que pudieron costar caros, no obstante, no estuvo acertado el Huesca en los metros finales. Soko, en un córner al segundo palo, remató de volea por encima del larguero completamente solo. Contaba los minutos por llegadas el cuadro oscense mientras que en el equipo de Luis Carrión solo De Blasis se probó con una volea lejana según le cayó la pelota, pero la envió alta.
La presión alta de los azulgranas puso en aprietos al equipo cartagenero, pero las tornas fueron cambiando poco a poco y un error en la salida del Huesca casi termina con el primero del partido. De Blasis recuperó un peligroso balón en la frontal y recibió la falta de Tomeo cuando se marchaba a portería. Pedro Alcalá envió un derechazo al poste en la falta directa en la más clara de la primera parte.
El gran trabajo de Alfredo Ortuño de espaldas proporcionó a su equipo estabilidad en campo contrario y le permitió avanzar metros en el campo cerca del ecuador de la primera mitad. A pesar de recibir un susto después de un centro de Ratiu que Kanté no consiguió conectar en el área pequeña, el Cartagena había igualado la balanza en cuanto a sensaciones y fruto de ello llegó el gol cartagenero a la media hora de juego. Ortuño tiró de experiencia, se adelantó en un mal control de Anglada en el área y recibió la patada cuando el defensa trataba de despejar. El de Yecla se encargó de enviarla a la escuadra para poner el 0 a 1.
Tras el gol, el equipo de Luis Carrión se sintió cada vez mejor y comenzó a conectar posesiones más largas con presencia en campo contrario y un hiperactivo Calero en la derecha, no obstante, durante los mejores momentos de los albinegros llegó el tanto del empate. En una acción aislada, Soko recibió en tres cuartos de campo, aceleró y puso un centro vertical que Kanté envió adentro sin dejarla caer de volea tras ganarle la espalda a Pablo Vázquez.
Terminó mejor el Huesca la primera parte, pero el Cartagena no se amilanó y saltó al campo en la segunda con mucha mordiente. Jairo y Calero, con una posición muy adelantada, comenzaron a generar problemas para el Huesca e incluso el madrileño golpeó al palo de cabeza tras un centro del tinerfeño. Ziganda introdujo a Gerard Valentin, Kevin Carlos y Sielva para mejorar a su equipo, atosigado por el cuadro albinegro, pero lejos de conseguirlo llegó el segundo tanto visitante. Mikel Rico la bajó en la frontal del área, filtró para Calero de cuchara y el lateral centró raso para Ortuño, que la esperaba en el área pequeña para rematar con fuerza y superar a Andrés Fernández pasada la hora de partido.
Después del segundo tanto, el Cartagena controló completamente el partido durante muchos minutos y el Huesca fue incapaz de generar peligro. No obstante, cuando el encuentro llegaba a su fin, otra acción puntual devolvió el empate al electrónico. Gerard Valentin arrancó lejos del área, se coló por detrás de un permisivo Datkovic y centró con potencia con la suerte de encontrar el desvío de Vázquez al palo corto y dos rebotes en Marc Martínez que terminaron con la pelota dentro.
No se rindió el Cartagena a pesar del golpe y en el descuento logró el gol de la victoria, de nuevo de penalti. Jansson se marchó por banda con calidad, la puso atrás para Tejera y Kento cometió falta sobre el catalán. Esta vez fue Sadiku, que había entrado por Ortuño, el encargado de certificar la victoria con un buen golpeo raso a la izquierda.
Logra los primeros tres puntos de la temporada el Cartagena y se quita de encima la ansiedad de visitante que sufrió el pasado curso. Arregla así el conjunto cartagenero el mal inicio ante la Ponferradina con un gran partido en El Alcoraz, aunque sigue teniendo deberes en la faceta defensiva, que puede corregir durante la semana con la comodidad que ofrece la victoria.
Luis Carrión: «Todavía tenemos que corregir situaciones defensivas»
El técnico del FC Cartagena, Luis Carrión, atendió a los medios de comunicación al término del partido para trasladar sus sensaciones después de la primera victoria del curso. El entrenador catalán valoró la buena lectura del partido de su equipo y la actitud que mantuvo durante los noventa minutos. «Hemos competido como el otro día y el equipo no tiene tanta diferencia jugando fuera o dentro. Siempre hay complicaciones fuera de casa, pero hemos estado bastante correctos. Hemos llegado bastantes veces y hemos defendido más o menos bien», afirmó.
A pesar de los tres puntos, Carrión es consciente de los errores de su equipo y sabe que debe corregirlos. «Todavía tenemos que corregir situaciones de centros laterales y pérdidas. El primer gol ha venido por una pérdida y tenemos que ser más contundentes en algunas acciones. También es cierto que generamos mucho y eso te puede generar problemas atrás», explicó el de Barcelona.
También comentó el entrenador la valentía que tuvo su equipo para reponerse de los goles, que llegaron justo antes del descanso y a cinco minutos para el final. «No bajamos los brazos mientras que el año pasado cuando recibíamos un gol parecía que se acababa el mundo. Hoy hemos recibido dos empates en momentos complicados y el equipo se ha repuesto», aseguró.
Por último, Carrión elogió a Alfredo Ortuño después de sus dos goles y su recital sobre el campo. «Tengo mucha confianza en mis dos delanteros. Estoy muy contento por lo bien que lo ha hecho Ortuño y por sus dos goles, aunque también estaba contento antes», concluyó Luis Carrión.
La Opinión
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