FC Cartagena 0-1 Racing Ferrol

El FC Cartagena suma su séptima derrota del curso después de caer derrotado por un inofensivo Racing de Ferrol en el descuento. Los cartageneros, que comenzaron imprimiendo ritmo, se fueron apagando y se contagiaron por el ritmo lento del rival. No fluyó el juego de los de Jandro Castro y la grada contestó con varios pitos ante la insuficiente actitud del equipo. En los minutos finales del encuentro, Ortuño perdonó ante el meta rival en la única ocasión cartagenera y Álvaro Giménez aprovechó la única oportunidad ferrolana, a balón parado.

Con muy poco se lleva los tres puntos el Racing de Santander del Cartagonova y deja al conjunto local tocado y hundido en la tabla. Con seis puntos, el Cartagena es penúltimo, a tres de la salvación, que se puede alejar.

Comenzó con ritmo el encuentro entre Cartagena y Racing de Ferrol, propuesto por los albinegros. Después de un buen recorte de Cedric Teguía, Luis Muñoz sirvió un centro que atrapó el portero rival antes de alcanzar el segundo minuto de partido y, pocos segundos después fue Dani Escriche el que llegó a línea de fondo desde la banda contraria para volver a centrar sin conectar con un compañero.

El primero en mover la pelota con intención fue el cuadro albinegro, que inició jugadas desde abajo con envíos largos a la espalda, volcando el juego ligeramente sobre la izquierda donde se buscó a Cedric. Misma táctica utilizó el cuadro visitante. En un centro ferrolano, Jairo derribó a Josué Dorrio en el área en una acción peligrosa, pero el colegiado del encuentro, Saúl Ais Reig, no apreció nada punible.

Se defendió el conjunto cartagenero lejos de su área, acortando los espacios a su rival, y provocó los errores del conjunto de Cristóbal Parralo cuando los suyos se acercaron a zonas decisivas. Eligió el conjunto de Jandro Castro cuando presionar y cuando replegar y se mantuvo cómodo durante el primer tramo de partido.

Intentaron los locales robar y salir rápido a la contra, pero no acertaron en sus decisiones en los últimos metros. A partir del primer cuarto de hora, el choque bajó de ritmo y las interrupciones no permitieron ver un juego fluido por parte de ninguno de los dos equipos. Todo fueron faltas en los duelos aéreos, imprecisiones y juego trabado en la medular.

Un cuarto de hora después, y habiendo alcanzado la media hora de partido sin ocasiones ni acercamientos ni disparos a portería, la grada cartagenera se impacientó y comenzó a silbar a los suyos debido a la pasibidad que mostraron durante la posesión rival. Aunque intentó despertar de su letargo el conjunto albinegro, la ineficaz presión en campo contrario no sirvió. 

El primer acto se fue apagando en ese contexto de lentitud y poca tensión competitiva, todo lo contrario a lo que debía proponer el Cartagena para llevarse la victoria en su feudo. Se llevó por eso el equipo otra pitada al tiempo que abandonaba el terreno de juego.

Surtió efecto el toque de atencióno la charla del técnico al descanso. Porque el Cartagena salió con otro aire al segundo tiempo y con mucha más intensidad que la mostrada durante los primeros cuarenta y cinco minutos. Tuvo dos ocasiones muy buenas para adelantarse. Cedric, cambiado a la banda derecha, se internó hasta línea de fondo, recortó hacia dentro y disparó contra un defensor cuando ya embocaba la portería. En la siguiente, Escriche se estrelló con el larguero en un centro envenenado que tuvo que sacar Jesús Ruiz.

Continuó teniendo presencia el Cartagena cerca del área, aunque no consiguió finalizar ocasiones, lo que llevó al entrenador contrario a modificar su equipo con varios cambios a la hora de partido. No esperó mucho más Jandro. Cinco minutos después, el asturiano introdujo a Hugo González y Alfredo Ortuño por Escriche y Gastón Valles para tratar de cambiar el rumbo del choque. 

No logró su cometido el técnico albinegro y el encuentro dio un paso atrás en intensidad. Transcurrieron los minutos y se volvió a la nada. No conectaron las líneas cartageneras y el futbol no fluyó en ningún momento. Llegó en el 78 una mala noticia para el Cartagena: la lesión de Sergio Guerrero. Por el malagueño entró Andy Rodríguez. 

En los últimos diez minutos del encuentro, los dos equipos agitaron el avispero a sabiendas de que, con muy poco, podían llevarse los tres puntos. Una llegada peligrosa del cuadro ferrolano fue contestada por una contra cartagenera y Josep Señé protagonizó el primer disparo a portería de su equipo en el minuto 83. 

Se pudo llevar el partido el Cartagena con la única ocasión de gol que tuvo, en las botas de Ortuño. Robaron los albinegros en campo propio y Andy puso a correr al punta con un pase raso vertical en dirección al área contraria. La recogió el yeclano, condujo con seguridad y le pegó tras pisar el área para toparse con la mano de Jesús Ruiz abajo. Naldo despejó en segunda instancia. Aunque la acción fue señalada como fuera de juego por el linier, no fue revisada por el VAR al no terminar en gol. 

Todo cambió con la jugada que marcó el choque en el descuento. Una balón de falta lejana servido hacia el área fue peinado por Naldo, controlado por Álvaro Giménez y enviado a la red por el delantero a la media vuelta ante la dubitativa salida de Jhafets. Sucedió lo mismo y el linier marcó una posición adelantada que parecía clara en directo. El VAR demostró que no. La punta de la bota de Kiko Olivas habilitó al delantero y, después de tres minutos de revisión, Ais Reig dio validez al gol que dio el triunfo a los ferrolanos.

Se fue el partido hasta el 95, pero no fue suficiente para un Cartagena que tuvo la última en un centro de Andy que se paseó por el área pequeña. Terminó el partido y el conjunto cartagenero sumó su séptima derrota del curso ante un rival directo que le adelanta en la clasificación. Se sitúa penúltimo el cuadro albinegro con seis puntos, a tres de la salvación.

La Opinión

No hay comentarios:

Publicar un comentario