En medio de la protesta de la afición, que entró diez minutos tarde al encuentro, el choque entre cartageneros y cordobeses comenzó muy eléctrico. La intensidad en la presión de ambos equipos marcó los primeros minutos y generó errores en la salida de balón. Falló la zaga cordobesista dejando mano a mano a Millán con el portero, quien no acertó con su vaselina. Falló también Pablo Campos con un mal pase que tuvo que corregir con su primera intervención.
La intensidad dio paso a un desorden que ninguno de los dos equipos podía detener. Se aprovecharon de ello Cedric y Álex Millán con espacios, corriendo con velocidad a la contra. No obstante, no llegaron a generar ocasiones de peligro. Para más inri, se descompensó el equipo y el Córdoba atacó los espacios abandonados por el Cartagena.
Pablo Campos salvó en dos ocasiones a su equipo. En un disparo de Antonio Casas desde dentro del área y en otro tiro a bocajarro de Marvel. Se volcó el Córdoba, puso más calidad en sus acciones y encontró el gol a los 35 minutos. Jugó con facilidad cerca del área y Carracedo encaró a Vukcevic en la izquierda antes de ceder a la frontal, donde esperaba Isma Ruiz. Libre de marca, tuvo tiempo para perfilar el cuerpo y pegarle con dirección y potencia al ángulo, haciendo inútil la estirada de Campos y poniendo el 0 a 1 en el marcador.
No supo reaccionar el Cartagena y únicamente llevó peligro por alto. Romo alternó las posiciones a Cedric y El Jebari y el hispanomarroquí tuvo una buena conducción finalizada con un disparo inofensivo. Estuvo más cerca el segundo que el empate en una triple ocasión de los visitantes que terminó con el balón en el lateral de la red tras la tercera intervención de mérito de Campos.
Así se fue el choque al descanso y en la reanudación pudo volver a marcar Carracedo. Llegaron pronto los cambios de Romo, quien introdujo a Delmás y Gastón Valles por Martín Aguirregabiria y El Jebari llegada la hora de juego. No mejoraron al equipo. Aunuqe controló el cuadro portuario el peligro rival, se quedó sin ideas en ataque. Como de costumbre, la toma de decisiones en los metros finales fue la asignatura pendiente del Cartagena. Los siguientes cambios tardaron más en llegar. Guerrero y Escriche entraron a diez minutos del final sin efecto alguno sobre el partido.
A pesar de refrescar al equipo, el cansancio después de tantos minutos persiguiendo sombras se dejó notar. Llegó tarde a la presión el Cartagena y le costó recuperar la pelota. Con cuatro minutos de margen entró al campo Alfredo Ortuño entre los pitos de la afición y no llegó a tocar la pelota en campo contrario.
Tras un alargue de cuatro minutos, el colegiado Andrés Fuentes Molina decretó el final del partido que deja al cuadro cartagenerista último a doce puntos de la salvación que pueden ser más cuando el Burgos recupere su partido aplazado.
La Opinión
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